EL HOMBRE QUE QUERÍA AGRADAR A DIOS
–Billy Graham
64 Años de matrimonio, 5 hijos, 19 nietos, 28 biznietos 64 años caminando de la mano con la mujer de su juventud, Ruth Bell Graham.
Casado una sola vez y hasta que la muerte de su amada los separó, un único matrimonio sin divorcios, sin recasamientos, sin mentiras, sin engaños, sin andar dejándose y juntándose a cada rato, solamente siendo fiel y leal, poniendo a Dios en primer lugar y estar apasionado por agradar y servirle al Señor haciendo equipo con la mujer de su juventud.
Billy Graham manejó toda su vida bajo una norma inquebrantable, tenía una política de no estar nunca a solas con una mujer, aparte de su esposa Ruth.
Un hombre que con su fidelidad y lealtad a Dios, supo gobernar bien su casa, supo amar a una sola mujer, la amó como Cristo amó a la Iglesia y en consecuencia tuvo una mujer fiel y leal a su lado hasta la muerte.
Un hombre de Dios, predicador y evangelista de los presidentes de EE. UU. vivió una vida de rectitud expandiendo el evangelio como ningún otro hombre, amó, cuidó, respetó y honró a su esposa dándole el mejor trato posible y quedándose junto a ella hasta la vejez y hasta que la muerte de ella los separó.
Si un hombre vive para agradar a Dios, se apasiona por servirle, tendrá la sensatez necesaria para cuidar más que a nada su matrimonio y una mujer casada con un hombre así, vivirá para honrar a ese hombre, le será por deleite sujetarse y respetar la autoridad en él.
Estos son los matrimonios conforme al corazón de Dios, estos son los matrimonio sabios y bíblicos, los cuales debemos seguir, cuán extraordinario ejemplo de amor, respeto y lealtad cuando los dos aman a Dios sobre todas las cosas y viven para agradarlo.
El gran legado de este mombre de Dios nos modela que, en Dios sí es posible obtener un matrimonio sin mentiras, sin engaños, sin traiciones y vivir una vida cónyugal plena, llena de dicha y representar así la más grata bendición hasta que la muerte los separe.
Reflexión por:
🥀–Luis Lovato (FAMILY FIRST).